Mandarica, que es toda una experta en esto de encontrar
canciones chorras (empiezo a tener serias dudas acerca de su gusto musical) me
pidió que destripara la letra de esta canción de la que, como poco, debo decir
que me dejó patidifusa.
El cantante es el mismo de vocecilla atiplada que ya nos
deleitó con aquella maravilla de “No es amor, es una obsesión” y con “Hoy es
noche de sexo”. Pero con esto hay que decir que ya se corona del todo. Os
presentamos…
“Propuesta indecente”
El título hace honor a la temática. A mí se me acerca
alguien con estas técnicas de seducción y os puedo asegurar que lo que menos se
me va a ocurrir es caer en los brazos de semejante chalado. Veamos:
Que bien te ves,
te adelanto, no me
importa quién sea él.
Dígame usted,
si ha hecho algo
travieso alguna vez.
¿Primero me tuteas y después me tratas de usted? ¿No se
supone que la cosa suele ir al revés? O sea, que te da igual que tenga pareja.
Tú vas a por todas, machote…
¿Si he hecho algo travieso? Bueno, con una amiga tocábamos
timbres y salíamos corriendo… a los veinte años. Ya ves, soy de lo más
traviesilla. ¿Eso cuenta?
Una aventura es más
divertida
si huele a peligro.
Me gustaría saber a qué huele el peligro. Es un misterio
como el aroma de las nubes. Y, llamadme clásica, pero yo no le veo lo
divertido. Una tiene ya una edad y no está para sobresaltos.
Y si te invito a una
copa
y me acerco a tu boca.
Si te robo un besito,
al ver que no vas
conmigo.
O sea, que te piensas que me vas a comprar con un cubata de
garrafón y encima piensas darme un beso por la fuerza si no te hago ni caso
ante tan magnánimo regalo. Eres un galán de los que ya no quedan.
¿Qué dirías si esta
noche
te seduzco en mi
coche?
Que se empañen los
vidrios
si la regla es que
goces.
¿En tu coche con los vidrios empañados? A ver, repito, tengo
una edad. La flexibilidad ya no es la que era así que creo que con los únicos
jadeos con los que iba yo a empañar cristales sería con los provocados por mis
últimos estertores al dislocarme todos los huesos. No tengo ganas de terminar
la noche en urgencias víctima de múltiples luxaciones. Quita, quita.
Si te falto el respeto
y luego culpo al
alcohol.
Si levanto tu falda,
¿Me darías el derecho
a medir tu sensatez?
Lo que te daría es una leche y una orden de alejamiento,
pedazo de psicópata.
Poner en juego tu
cuerpo,
si te parece prudente,
esta propuesta
indecente.
En primer lugar, una propuesta indecente no debería ser
prudente. Si es prudente pierde la indecencia. En segundo lugar, yo ya no pongo
en juego nada. No estoy para trotes, querido mío.
A ver a ver,
permítete apreciar tu
desnudez.
A la vez,
este Martini calmará
tu timidez.
O sea, que pretendes emborracharme. ¿Por qué no me echas
burundanga en la copa, ya que estamos? Ahí tienes el éxito asegurado. Lo dicho,
un psicópata de manual.
Luego vuelve a repetir en bucle la misma sarta de sandeces y
termina invitándome a bailar bachata y terminar con él en la cama, todo en una
mezcolanza de inglés, castellano y un ligero toque de portugués, para que vea
que es un hombre de mundo.
Lo que me ha hecho gracia es que en Tú Tubo todos los
comentarios son en plan “Qué bonita”, “Qué canción tan romántica…”. ¿Nos hemos
vuelto locos? Y que este hombrecillo se llame Romeo…
Yo soy Julieta y colapso.